ROYAL SOLARIS CANCUN, Cancún

Mi estancia en Royal Solaris fue en general buena, aunque no estuvo exenta de sorpresas. La limpieza y el ambiente en el hotel eran estupendos, pero tuvimos algunos inconvenientes con la habitación y las reservas para cenar. A pesar de esos problemas, el personal fue amable y servicial, lo que hizo que la experiencia fuera más agradable.

Tuve una buena estancia en Royal Solaris Cancún, aunque hubo algunos detalles que mejorar. La limpieza del hotel fue excepcional y el servicio del personal, muy atento y amable, hizo que nuestra experiencia fuera agradable. Sin embargo, el proceso de check-in fue un poco lento y, lamentablemente, tuvimos problemas con la decoración de la habitación y la disponibilidad en los restaurantes que se mencionaron en la reserva, lo cual fue frustrante.

Mi estancia en el Royal Solaris Cancun fue muy buena, destacando especialmente la amabilidad del personal y la limpieza de las instalaciones. La variedad de comida en los buffets fue amplia, aunque la calidad de algunos platos no cumplió con mis expectativas. Sin embargo, el ambiente en la alberca y las actividades ofrecidas hicieron que mi experiencia fuera positiva en general.👏🌴

Tuve una experiencia mayormente positiva en Royal Solaris Cancún. La atención del personal fue excepcional y siempre estaban dispuestos a ayudarme, lo que me hizo sentir bienvenido. Sin embargo, la calidad de la comida fue un gran punto negativo, ya que noté que había una falta de variedad y algunos platos no cumplían con mis expectativas. En general, disfruté de mi estancia, pero el tema de la comida es algo a mejorar.

Mi estancia en Royal Solaris Cancún fue bastante agradable en general, aunque había algunos aspectos a mejorar. La limpieza de las habitaciones fue impecable, gracias al personal atento que siempre tenía una sonrisa. Sin embargo, la información y comunicación sobre los servicios del hotel fue un tanto limitada y a veces confusa. La variedad en la comida podría ser mayor, aunque el sabor fue generalmente bueno. Los cócteles eran generosos, lo cual fue un punto positivo.